Es probable que lo sepas, pero también es probable que no. Primero debo aclarar, este post va a estar dividido en dos partes, y es totalmente necesario hacerlo así para lograr entender un poco más la mentalidad y el pensamiento chino y, en cierta forma, creo yo, una de las razones por las que con tan solo sesenta y tres años China es hoy la segunda potencia mundial.
Esta primera parte va a estar dedicada a la censura, y de paso va a servir como guía para todos aquellos que estén por viajar al gigante asiático. Cuando uno llega al país, enciende su computadora y se conecta a internet quizás quiera ver su seria favorita o lo que pasó en la semana a través de youtube. Entonces abre la página y sale un cartel que dice que no se puede conectar y que la página no existe. Bueno, será que la están actualizando piensa uno. Llega entonces la hora de colgar las fotos que sacó en facebook para mostrarle a sus amigos. Abre la página y otra vez lo mismo. Ya un poco nervioso piensa: bueno, me voy a entretener viendo los tweets de la farándula o si el dólar blue sigue al mismo precio, y al poner twitter este tampoco se abre, y es en se momento, justo cuando se da cuenta de que ya no va a poder ver los comentarios de Jorge Rial o la bombas de Luis Ventura, que uno piensa seriamente en tomar el teléfono y comprar un pasaje de vuelta.
Es verdad, en China están bloqueadas la mayoría de las redes sociales occidentales. En mi caso en particular, me acuerdo que justo cuando viajé estaban dando por televisión esa serie que quizás alguno recuerde llamada El cartel de los Sapos (en Argentina, en otros países creo que se llamaba simplemente El Cartel) y me tenía muy enganchado. A mi me encanta mirar películas pero no soy muy consumidor de televisión, y por fin que me enganchaba con un programa no iba a poder ver como terminaba. El tema fue que cuando la serie estaba en sus últimos capítulos yo viajé a China pensando con toda mi inocencia «no hay problema, la termino de mirar allá». Pero claro, que iba a saber yo que en China no había youtube. El sentimiento es como haberse mirado una película entera y que en los últimos diez minutos se corte la señal del cable. Ya sé, no es tan grave como que unos militares armados entren de sorpresa en tu habitación en un pueblito del interior de China, te pidan el pasaporte y se lo lleven y vos no sepas siquiera como preguntarles que pasa (cosa que me sucedió, pero eso mejor lo cuento en el libro), pero osea, me había comido varios meses de mirar todas las semanas cada capítulo y ahora me iba a quedar con la duda existencial de como concluía todo. Ya se que podría haber preguntado a mi familia, pero no es lo mismo que te lo cuenten. Yo sabía que de alguna forma tenía que poder mirar el final de la serie. Fue así que descubrí que había una forma de saltar la censura y los sitios bloqueados, y era a través de un VPN. ¿Un qué? Hablame en español. Ok, primero definamos VPN. VPN quiere decir Virtual Private Network, o en español, Red Privada Virtual.
Listo, ahora un poco a lo técnico y terminamos. Cuando nos conectamos a internet la empresa que nos presta el servicio (Speeedy por ejemplo), detecta desde que lugar del mundo nos estámos conectando. Si nosotros estamos en China nos va a detectar que nos estamos conectando desde ese país y es ahí donde viene el problema. De alguna forma hay que lograr que la conexión detecte que estamos en otro país, y es ahí donde entra en juego el VPN, que en sí no es más que un programa que uno puede bajar y configurar en su computadora. Hay varias formas de hacer esto, pero lo ideal, lo más fácil, algo que no requiere absoluto conocimiento de nada es contratar una empresa que nos brinde este servicio. En mi caso personal yo usaba Astrill: www.astrill.com . Me gustaría que me paguen por recomendación, pero lamentablemente no es así. No importa, lo recomiendo igual, y a todos los que viajen a China, les diría que es casi fundamental. El sistema es muy fácil, uno se registra, hace el pago, le envían el programa por correo electrónico, lo abre, nos aparece una lista de países para elegir, hacemos doble clic en el que nos gusta más y automáticamente nuestra computadora, en vez de estar conectada desde China va a estar conectada de Argentina, o USA, o Irlanda, o del país que a uno le guste más. Eso es todo, no hay más ciencia, al momento vamos a poder ver los tweets de Ventura.
Ahora, ¿por qué recomiendo perder 39 dólares cada seis meses y tener esto? Es verdad que se puede vivir sin youtube, facebook y quizás, sin las peleas de las vedetongas (aunque esto último no estoy seguro del todo), pero el problema es que el gobierno chino tiene bloqueado de los buscadores un diccionario de términos y palabras como democracia o como derrocar al comunismo, y tampoco se pueden ver videos para adultos o cosas donde se muestre una protesta dentro del país. Obviamente uno no va a buscar como derrocar al comunismo chino (bueno, al menos yo nunca lo hice), pero quizás uno busca algo en google que no tiene relación con esto y cuando va a abrir una página ese sitio tiene un párrafo mencionando la palabra democracia varias veces, o quizás el sitio tiene fotos de mujeres semidesnudas, o quizás tiene varias veces palabras que están bloqueadas por el gobierno, y aunque el sitio no tenga nada que ver existe la posibilidad de que la página no se abra y nos diga que no exista. Por eso, una vez más, esto es fruto de mi experiencia, y por experiencia propia recomiendo que todos los extranjeros que estén por viajar a China y quieran navegar sin problemas en internet contraten un servicio de VPN como el que mencioné y se van a ahorrar así muchos dolores de cabeza, y muchas de esas feas palabras que salen de nuestra boca en momentos de desesperación.
Nota 1: Finalmente pude ver el final de la serie, y las malas palabras salieron de todas formas tras ver un final tan malo para un programa tan bueno.